No soy la típica pizza

Hoy vamos a explicar cómo preparar la archifamosa «nosoylatipicapizza». Debe tener en cuenta que nosoyeltipicofriki.com (uséase, yo) rechaza toda responsabilidad sobre las consecuencias ocasionadas por la preparación de este plato. Hágalo bajo su propia responsabilidad.

Ingredientes:

  • Una pizza congelada de masa fina(En mi caso utilicé ésta, pero el resultado será similar con otras).
  • Pocas ganas de cocinar.
  • Poca maña.

Preparación:

  • Vaya a un hipermercado y adquiera la pizza.
  • Tómese su tiempo antes de llegar a casa, descubriendo al llegar de que la pizza está completamente descongelada.
  • Ponga a calentar el horno, y una vez que el horno esté caliente, extraiga parcialmente la rejilla del mismo y trate de colocar la pizza sobre él. Descubra que la pizza ha quedado arrugada.
  • Trate de estirar la pizza. Descubra que al estirarla, la pizza empieza a deslizarse por los huecos de la rejilla que se encuentran pegados a las paredes laterales del horno.
  • Trate de recoger los bordes de la pizza con una espumadera, arrugándolos contra el resto de la misma. Descubra que esos bordes también son capaces de lanzarse al vacío a través de otros huecos de la rejilla diferentes de los anteriores.
  • Extraiga completamente la rejilla, y trate de recolocar la pizza de un modo seguro ayudadándose con la espumadera y un cuchillo. Descubra que, en varias ocasiones, cuando usted se ayuda con el cuchillo únicamente consigue hacer cortes en la masa que propician el escape del tomate.
  • Decida que lo mejor será doblar la pizza a la mitad, a lo calzone, si realmente desea terminar comiéndose esa pizza. Descubra que en la operación, la pizza se rompe más todavía, en gran parte gracias a los cortes hechos con el cuchillo en el anterior paso.
  • Consiga colocar la pizza de cualquier modo estable y métala en el horno unos 20 minutos. Descubra que, cuando grandes cantidades de tomate y queso se van suicidando contra el fondo del horno, se escuchan unos sonidos muy característicos.
  • Extraiga la pizza e incline la rejilla unos 30 grados para que la pizza se deslice y vaya a parar al plato. Descubra que la pizza se ha abrazado a la rejilla, negándose a abandonarla.
  • Gire la rejilla 180º, quedando la pizza colgando de ella, y oblíguelas a separarse. Utilice la fuerza y/o el cuchillo si lo cree necesario. Descubra que el resultado es, cuanto menos, novedoso:

pseudopizza malapinta

Sí, es una historia real. Y sí, a pesar de su aspecto, la pizza estaba buena. Y sí, de verdad era una pizza al principio.